Definición de Literatura
Literatura es el estudio de las letras, se entiende género literario, cuales clasifican las obras en lírico, épico y gramático.
La palabra literatura proviene del latín”litterae” que significa una instrucción o conjuntos de saberes o habilidades de escribir y leer bien, y se relaciona con el arte de la gramática, la retórica y la poética.
En el Diccionario Real Academia Española (2001), literatura es el arte que emplea como expresión una lengua. También nos dice que es el conjunto de las producciones literarias de una nación, de una época o de un género.
La definición de literatura infantil es una categoría de libro cuya existencia depende absolutamente de las supuestas relaciones con una particular audiencia: la infancia.
La literatura juvenil es la que está escrita para los lectores adolescentes (niños y jóvenes de entre doce a diecisiete años).
En el marco de los estudios literarios suele estudiarse de forma conjunta con la literatura infantil, en lo que se conoce justamente como literatura infantil y juvenil.
Siglo XIX
Durante el siglo XIX nace en el mundo occidental la literatura infantil y juvenil teniendo como consecuencia la escolarización. La escuela ha sido el principal cliente de la edición infantil, satisfaciendo en sus criterios pedagógicos ya que éstos influencian en la compra de libros.
A comienzos del siglo XIX, el romanticismo y su exaltación del individuo favorecieron el auge de la fantasía. Numerosos autores buscaron en la literatura popular su fuente de inspiración y rastrearon en los lugares más remotos de sus respectivos países antiguas leyendas que recuperaron para los niños. Así surgieron grandes escritores como: Jules Verne quien escribió Veinte mil leguas de viaje submarino (1870). Jacob y Whilhem Grimm, escribió Pulgarcito, Barba Azul, Blancanieves o Cenicienta y Caperucita, que ya se conocían en la versión de Perault del siglo anterior.
Otros escritos fueron Aladino (Walter Crane), Alicia en el país de las maravillas (Carroll Lewis), Las Aventuras de Tom Sawyer (el estadounidense Mark Twain), El príncipe feliz (Oscar Wilde) y Pinocho (Carlo Collodi) entre otros.
Siglo XX al Siglo XXI
La literatura infantil adquirió, por fin, su autonomía en el siglo XX y ha tenido continuidad en la actualidad. La psicología del niño, sus intereses y sus vivencias son tenidas en cuenta por los escritores que laboran mucho más sus personajes, les dotan de vida interior y les hacen crecer a lo largo de la obra.
La entrada de la literatura infantil y juvenil en el ámbito escolar y el aumento de la oferta editorial de estos libros, son factores que permiten que niños(as) tengan contacto con la literatura infantil y juvenil prácticamente desde que nacen y a lo largo de toda su infancia. Por ello, desde el punto de vista educativo, resulta indispensable el conocimiento de esta literatura para entender el itinerario que siguen los niños(as) en su aprendizaje.
Según Pablo Barrera (1997) nos dice que la lectura literaria en la adolescencia presenta serias dificultades. Estas dificultades se dan a partir de los siguientes factores básicos: falta de una sólida competencia lectora y situación psicosocial y sociocultural del lector.
EL siglo XX se conoce como el siglo del esplendor del libro infantil. El libro se distingue por el uso de colores llamativos y de elementos gráficos innovadores. Aparecen nuevos formatos gracias a las técnicas pictóricas y la ilustración de las historias, donde las palabras son acompañadas de im ágenes que contextualizan la narración y aportando nexos de unión a la historia, es la aparición del libro-álbum o álbum ilustrado, género en el que destacan autores como Maurice Sendak, Janosh, Quentin Blake, Leo Lionni o Barbet Cole.
Algunos libros han resultado un punto de referencia fundamental, tanto para los niños como para los adultos, este ha sido el caso de El Principito (1943, del autor Antoine de Saint –Exupéry). Tal fue el caso de la autora británica J.K Rowling, con sus historias de Harry Potter, literatura escrita para adultos y que tanto niños(as) y adolescentes han convertido como sus favoritos. Este fenómeno es conocido como la literatura ganada; literatura que no era para esa edad, pero al transcurrir el tiempo, los niños se apropiaron de ella.
Ya, en el siglo XXI, la literatura infantil y juvenil se encuentra muy consolidada dentro de los países occidentales, donde las ventas son enormes y la producción literaria vastísima. Numerosos escritores de todo el mundo han sabido conectar con los gustos del público infantil y juvenil y han llegado a crear auténticos éxitos universales. Si bien lo mencionado es cierto, también no es menos cierto que mientras algunos niños le fascina leer, hay otros que detestan la lectura. Por la razón antes mencionada debemos buscar la manera de enamorarlos con la lectura. No es sólo el leer si no de enjuiciar lo leído. Desde nuestros hogares debe comenzar este proceso.